El Holandés Errante de Calafell

Huub van den Broek, nació y vivió en Holanda hasta los 17 años. Allí de pequeño empezó a navegar con los boy Scouts del mar, luego trabajo en un viejo barco de transporte de mercancías y se sacó el título de capitán, y estuvo trabajando en viejos barcos de carga por el Rhin, pero como le explotaban demasiado, a los 17 años se fue a trabajar de camarero a un bar de Calafell, (provincia de Tarragona, España) y allí se quedo a vivir, y tiene dos hijos. Creó su propio bar, un pub que llegó a ser muy conocido durante los 25 años que duró, el Baccara. y los días que no trabajaba se dedicaba a la espeleología y a navegar con su tabla de windsurf y su patín catalá, con el que un día se fué y volvió a Ibiza. Fué una larga historia de pocos pero intensos días. También muchas madrugadas, al cerrar el bar, se iba a Vilanova patinando y luego se volvía hasta Calafell, (unos 10 km en total), para descargar un poco la adrenalina.

Hace como 7 años se dedicó a cumplir un sueño que alimentaba desde pequeño, y se se fué a dar la vuelta al mundo en su barco, el Holandés Errante, un pequeño velero de 8,3 m. (o 27 pies, en lenguaje marinero).
Encontró el barco muy barato pero muy abandonado en un canal de Holanda. Se dedicó con paciencia y ganas a arreglarlo, y luego emprendió el vieje hacia Calafell, atravesando Francia por el canal de Midí. Levó anclas del puerto de El Vendrell en el año 2000. El estrecho de Gibraltar se le puso difícil y aguantó allí una terrible tormenta, y mas tarde, en En Las Palmas de Gran Canaria sufrió un incendio que casi acaba con su sueño. Desde Cabo Verde, el entrañable “Petit país” de Cesaria Evora, zarpó para atravesar el Atlántico llegando a Barbados al cabo de 28 días, dspués el Caribe con su rosario de paraísos: Bequia, Santa Lucía, San Vicente, Cariacou, Maireau, Trinidad, Chacachacare y la isla de Monos, Islas Testigos, Copagua, isla Margarita, islas Aves, islas ABC, Los Roques. Luego atravesó por el canal de Panamá, llegando a la costa del Pacífico, las islas Perlas, Contadora, Pedro Gonzalez, la isla del Coco y Galápagos. Desde allí hizo la travesía Pacífico, (25 días hasta Fatu Hiva, (islas Marquesas, en la
Polinesia francesa.)

Niue, Tonga, Fidi, Vanuatu, Nueva Caledonia, desde donde viajó a Europa para ver a su familia. Al cabo de 9 meses regresó a Nueva Calededonia y luego volvió a Niue (Tonga) Zarpó de nuevo hacia Fiji, Nueva Caledonia, Vanuatu y islas Solomon.

 

A los 16 años, en una esclusa de un canal de Belgica en un viaje para llevar un barco de Holanda a Amberes

 


Autofoto, en la travesía en solitario Calafell - Ibiza, en mi patín català, dos años antes de emprender mi gran viaje

En una pequeña y solitaria isla de Los Roques, en el caribe venezolano

Sábado, 16 de diciembre de 2006 0:33

humberto van den broek
Kingdom of Tonga South Pacific Vava'u
Tapana Island tel 00676 59798 i 00676 12310

Bueno amigos y amigas allá donde estáis, pues como quizás sabéis, en el año 2006 hice mi primera vuelta a Calafell, después de unos 5 años de navegación por los mares de Dios. Antes de volver a "casa", había llegado a la Nueva Caledonia, casi cruzado todo el Pacifico y tenia que hacer un pensamiento cara al futuro. Mi inesperado viaje a Cataluña y mis escalas en varios países de Europa y Asia me han dado la respuesta cara a esta futuro.

Primero de todo hay que decir que mi llegada al Pueblo de Calafell ha sido genial. Estaba mas que sorprendido que mucha gente estaban todavía al tanto del viaje del velero que siga llevando el nombre de Calafell por donde navega. Es mas, gracias a las publicaciones y también por la pagina Web en español, hecho por mi amiga / tripulante a rachas, la Nuria, habían gente que hasta podían recitar varias historias publicadas en ambas medios. Han publicado la pagina Web en una revista de Vela en Holanda con miles de entradas, igual que en América del Sur de que han llegado tantas reacciones que se inundo mi enlace al e-mail de la pagina-Web. Muy agradable saber que así también estáis como de viaje con este fabuloso velero que ya es como una parte más de mí mismo.
Parece ya que cada movimiento, cada ruido, cada balanceo y cada navegación, dura o alegre va directamente conectado con mi cerebro, como una pareja que se quiere mucho y que ya sin hablar se entienden. Bueno, me gusta filosofar, pero luego mas de eso.

Pues mi vuelto en avión a Europa me ha servido para decidir que NO HABRA VUELTA.
Feliz por muchas razones, entre las más importantes, poder volver a ver a mis hijos, mujer y mi amiga / tripulante Nuria, mucha familia y cantidad de gente que estimo mucho, he visto que una vez conociendo esta otro mundo, pues por aquí me quedo.

En la ida a Cataluña y también a la vuelta, hice unas escalas en Asia, lo que podía haber sido probablemente el próximo destino en el camino a Europa. Pues todo tiene lo suyo, pero de verdad, el Pacifico Sur no tiene competencia. Por aquí hay tantos archipiélagos con infinito de islas, cada una con su particular buen espirito que seria un pecado y un desprecio de no dedicarme a conocer todo lo que puedo ya estando aquí.

Pues, así, después de volver a llegar a la Nueva Caledonia, tomé la decisión de hacerme "una base" en el sitio que más me ha gustado, las islas de Vava´u en Tonga, y desde allí con el tiempo, a dedicarme plenamente en la exploración de los paraísos de los mares del sur. (¿Además suena bonito, verdad?). Eso significaba, media vuelta, contra corrientes, vientos Alisios y olas viniendo del oeste.

La tercera semana de abril 2006 hice la "remontada hacia las islas de Fiji. Eso Si, bien equipado esta vez. Estrenando el motor nuevo del El Holandés Errante. Un Sole de 26 caballos. (Ya vez, fem país) Esta hecho en Martorell y llego en la Caledonia con un barco carguero después de un viaje de 2 meses. Ha sido imprescindible para poder remontar hacia el oeste y después de tantos años sin motor o con motores con caballos enfermos es una nueva vida cara a la navegación. El hecho de que con dar la vuelta a la llave de arranque para que se despierten y cumplen todos estos caballos sin protesta alguna es pura alegría, aparte de la seguridad y posibilidad de llegar donde antes no podía llegar.

Para poder llegar a Fiji, primero me dirijo hacia Australia, para encontrar vientos favorables e hice unos 1800 kilómetros en 9 días, genial.
En la pagina de Fiji salen muchas fotos de los 5 meses que pase en estas islas, di la vuelta a gran parte del archipiélago, que es gigante. Ha habido muchas aventuras como siempre, grandes, pequeñas, agradables, duras pero todas ellas las he vivido a tope, como si cada día era mi última. (Así es también cuando comen la gente del Pacifico, como si cada comida es la ultima que pueden disfrutar) (U mais divino que hay o mundo es vivir cada segundo como nunca mais---, como canta Vinicio de Moraes)

En detalles saldrá en el libro que un día espero que vea la luz, pero por ahora solo un par de cosas del tiempo allá. Una de ellas la mala suerte de quedarme con una espina peligrosamente clavado en el cuello. Para eso he tenido que ir al hospital del capital de Fiji, que es Suva. Ha sido una experiencia de lo más duro que me acuerdo. En los 2 intentos fallidos de sacar en la sala de operaciones (que allá lo llaman "teatro") estaban a punto de acabar conmigo y sobre todo con mi virtud de hablar. De los 12 pacientes que había en la sala donde estaba, se murieron 3 en 8 días. (Bueno, una de vieja, eso si) Bueno, al final he ido urgentemente a la Nueva Zelanda donde me salvaron.
Cuando vieron en las fotos-escáner lo que me habían intentado de quitar en Fiji, me dijeron que lo que intentaron de sacar era el huesito de mis cuerdas vocales. Menos mal que no les salía bien esta operación. Bueno, eso una experiencia.

Otra una muy bonita. En la parte del norte de Fiji hay 2 islas bastante grandes que se llaman, Kiowa y la otra Rabi. Allá viven gente de las islas Gilbert y Kiribati, que son de la parte de la Micronesia. Tienen como una autonomía propia dentro de Fiji. Una isla esta donada porque en las islas de Kiribati ha subido tanto ya el nivel del Mar que se están quedando con poco espacio para los que viven aquí.
La otra, Rabi fue comprada por los Ingleses, como recompensa de "cargar "la islita de "Banaban", o "Ocean Island", que explotaron para sacar los fosfatos, igual que hicieron con la isla de Nauro, también en la Micronesia. Resulta que su gente es de lo más agradable que se puede imaginar y conviví un mes con ellos. Parece que su vida consiste en trabajar lo mas mínimo posible y hacer fiestas y cantar y bailar lo máximo. Una gran diferencia con los Fijianos es que ellos no tienen ningún odio a nadie.
Explico: En Fiji hay 3 razas, un poco mas de la mitad son de la India, importados como trabajadores baratos y resistentes para el trabajo en los campos de caña de azúcar cuando Fiji formaba parte del imperio Británico. El resto casi todo Fijianos y un pequeño porcentaje de Chinos.
Pues en resumen se llevan como el fuego y el agua.
Ambos razas se portaron bien conmigo (los chinos ni fu, ni fa) pero entre ellos existe en general un gran odio que siempre este presente y muy desagradable.
Pues fue un respiro de pasar un tiempo entre gente sin esta mal rollo. Durante la circunnavegación de Fiji me sorprendió una gran tormenta cuando iba camino Suva, una tormenta en que se perdieron varios barcos por la misma zona por donde me encontraba yo en el momento. Son cosas duras, estas luchando tú mismo para salir lo mejor posible de ello y después te enteras de la gente que nunca ha llegado a puerto.

Bueno, quizás por eso hay que disfrutar de cada segundo cada minuto y todo lo que tenemos de tiempo.
Desde Fiji, hice la travesía al Kingdom of Tonga en 4 días, y llegue aquí el 9 de octubre de 2006. Fui un viaje con movidas, literalmente, porque al acercarme al Vava'u, resurgió (a 130 kilómetros de mi destino) una isla nueva de trinca, 40 metros de altura él mas alto de sus 3 picos, humo amarilleante y apestoso saliendo desde los fondos por mí alrededor y las profundidades ya no coincidían con las cartas náuticas, que daba miedo, así motor a tope y salir de allá antes de acabar también con "el Holandés errante " por la cima de una isla nueva. Bueno, hay mas escritos de eso en la pagina-web.

Es aquí donde estoy limpiando una parte de la isla de Tapana para hacerme cuando puedo una casita, construida sobre las aguas mas trasparentes que uno puede desear. Ya he sembrado mi vieja plantación que tenia por aquí en el año 2003 y las primeras cosas ya van saliendo.
Por aquí esta el restaurante más famoso del todo el Pacifico, hecho de troncos de cocotero y de lo que llego flotando a sus (5) playas. Se llama "La Paella" y esta llevado por Eduardo y Maria Pilar, el es Vasco y ella del Mediterráneo. Eran un día navegantes que han hecho de Tapana su jardín del Eden. Caminas entre árboles grandes de Papayas, pinas, Bananas y las hojas enormes y preciosas de Kapa y Taro entre ellos.
También vive un gran Tongano, el Wiliamy, quien es que se dedica a plantar, y ahora también "el holandés errante de Calafell".
Cada mañana el Wilyamy y yo ponemos la red de pescar que llevaba yo en el velero.
La Maria y Eduardo han construido una cabaña (se llama "La cabaña "), esa se alquila por un precio muy razonable. Tiene vista a una de las bahías más bellas de la isla de Tapana. Tiene las puestas de luna más bonitas de todas las que he visto desde la altura donde esta echo. En conjunto con ellos voy a llevar visitantes con el velero, las veces que haya gente de visita en la isla. Ahora ya no vienen barcos como desde Noviembre hasta el mes de mayo hay época de huracanes, pero el resto de los meses hacen comidas para todas los navegantes que pasen por el archipiélago de Vava'u, como se llama esta parte del reino de Tonga.
Cada vez que haya gente, hacemos un rato música, El Wiliamy y yo la percusión, la Maria la Caracas y el Eduardo la guitarra y la voz, y a veces cantamos todos, pura alegría.

Vava'u es relativamente pequeño, con un total de poco mas de 10.00 habitantes, tiene unos 15 por 20 kilómetros, dentro de ellos aguas supertransparentes, 34 islas y islitas, la mayoría de ellas inhabitadas, ballenas saltando durante 8 meses del año, aunque siempre es verano por aquí, buena pesca, y la gente con la sonrisa abierta y muy amables. Por aquí aun los niños te saludan con caras alegres cuando te cruzas con ellos, quizás porque no hay televisión.
Pues desde aquí, una vez establecido me gustaría hacer de vez en cuando una escapadita de medio año o algo así hacia otras partes que aun no he visto. Es muy agradable de saber que hay un sitio céntrico a donde puedes venir a vivir, y vivir bien.

Bueno amigos, eso un poco de resumen de cómo están las cosas por aquí. Os deseo mucho placer con la página Web y recuerda, si podéis permitiros, aunque sea solo una vez en la vida, pues apuntaos unas vacaciones en Tápana, serán inolvidables, es uno de los paraísos de vuestro planeta. Y de la vida ya lo sabéis..........., vivir cada segundo, como nunca más!!!!!
humberto

 


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